Te escucho nene! y tenés mucha razón (a veces).
Ahí van 2 gráficos parecidos a los del post anterior, pero tomando sus recomendaciones.
En el primero están: variación de M3, variación de IPC GBA y variación del IPC Nacional excluyendo Capital y conurbano. Todos datos publicados por INDEC. Encuentro interesante ver como un índice de precios (al parecer no dibujado) como es el IPC Nacional arroja la misma gráfica que la variación de M3 pero con un trimestre de resago.
El segundo es simplemente que me comí una coma, no era el PBI precios constantes que ni así podíamos llegar al cincuentipico porciento.

Por otro lado, parece que no estoy tan sólo en el mundo. Más allá de la preocupación por la inflación que les comentaba de parte de Heymann, Frenkel y la población en general, hoy le sumé, con mucho agrado, las palabras de Joseph Stiglitz en la conferencia de AEA. Toda la charla estuvo centrada en el hecho de que considera que, si bien es posible seguir creciendo a tasas altas (habló de un 8%), el rol de la política deberá enfocarse de ahora en adelante en lo que denominó "políticas activas", entre las cuales desarrolló: capacitación a desocupados de largo plazo, instrumentos de crédito a PYMEs, fomento de sectores con intervención directa estatal (dio el ejemplo de que internet comenzó siendo un programa estatal), etc.A modo de conclusión detalló que, sin dejar de mirar la demanda, encuentra necesario prestarle más atención a la oferta y que Argentina necesita un proceso profundo de acumulación de riqueza.





Por otro lado, Ecuador muestra en todo el período un saldo negativo en cuenta corriente, por lo que no puede encontrarse ahí la razón de la inflación observada. De hecho, debido a esto, y a que el monto total de deuda externa de la economía permanece prácticamente constante, la expansión monetaria a 2001 no es relevante. De hecho, en porcentaje del PBI la M2 disminuye (CEPAL, a continuación).
Se presenta entonces la paradoja de un país que utiliza una moneda de otro y, sin embargo, se observan en él pérdidas de valor adquisitivo de la misma muy superiores a la del país de origen.

En conclusión, la importancia de las remesas es vital, sin embargo, la importancia de las mismas está más orientada a hacer sostenible la dolarización a partir del importante saldo negativo en cuenta corriente que registraría la economía si ellas no existiesen, con fuertes consecuencias para el stock de deuda o para la oferta monetaria, que a explicar el proceso inflacionario en la región.
Sumado a esto, existe una importante demanda de dólares por parte de agentes ubicados fuera del territorio norteamericano, al extremo de países como Ecuador que utilizan esta moneda ya no como divisa sino como medio de cambio.

